“¿qué tarjeta o interface debería emplear en mi estudio?” Te ofrecemos las claves para conocer la respuesta...
Es
probable que tu ordenador musical llevase una tarjeta de sonido
preinstalada, pero a menudo, suele ser insuficiente para trabajar en tu
estudio (sin embargo, nunca desprecies a priori esa tarjeta: al menos
comprueba que no te sirve). Así pues, ¿qué factores deben influir en la
elección de tu tarjeta de sonido?
Podemos clasificar las tarjetas por el tipo de interface
(USB, FireWire o PCI), por su dotación de entradas y salidas, por las
resoluciones y frecuencias de muestreo o por los extras incluidos, como
previos de micro, superficies de control o procesadores DSP. Sólo en
unos contados casos, el software que utilices dictará tu decisión como
sucede con la familia Digidesign ProTools.
La
resolución y la frecuencia de muestreo ya no son unos factores tan
decisivos como antes. Casi todas las tarjetas actuales pueden funcionar a
24bit, así que no te conformes con menos. Y muchas muestrean a 96kHz o
más, lo cual es suficiente para casi todos los estudios domésticos.
Además,
en los últimos tiempos, las tarjetas USB y FireWire han dejado de ser
patrimonio exclusivo de los portátiles. Los ordenadores musicales de
sobremesa han utilizado casi siempre tarjetas PCI, pero los últimos
modelos USB y FireWire son bastante atractivos. Sin embargo, las
tarjetas con bus PCI son más baratas y suelen ofrecer más
características. Los usuarios de portátiles tienen otra alternativa, las
tarjetas PC Card (también llamadas PCMCIA o CardBus) que se insertan en
el slot PC Card que ofrecen muchos portátiles, aunque no todos.
Estas
tarjetas son las más portátiles de todas porque, menos el cable o la
caja de E/S, son casi internas. No obstante, traen menos características
por el mismo precio, y no es tan fácil compartirlas entre un portátil y
una torre PC, a menos que uses un adaptador PC Card.
Las tarjetas
USB permiten emplear un número limitado de entradas/ salidas
simultáneas, debido a la relativa baja velocidad inherente al protocolo
USB. Muchos interfaces USB ni siquiera soportan frecuencias de muestreo
superiores a 48kHz y, en ese caso, tan sólo ofrecerán una simple
conexión estéreo. Por el contrario, los dispositivos FireWire suelen
soportar 24 (o más) conexiones simultáneas de hasta 96kHz.
Resumiendo,
las tarjetas USB y FireWire son adecuadas para estudios de sobremesa
que necesitan pocas E/S, y resultan muy atractivas para trabajar con
portátiles, ordenadores ‘todo-en-uno’ (como un iMac, que no permite
ampliaciones PCI) o si tienes que compartir la tarjeta entre varios
ordenadores.
En todo caso, las tarjetas PCI siguen siendo la opción más económica.
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Publicado originalmente en Future Music 99